Vuelvo a estar cagada, y es una sensación que conozco al dedillo. Me pregunto si estar cagada es la sensación de estar viva, quizás estar cagada es la sensación que nos manda el cerebro cuando siente que vas por el buen camino… La desidia, por tanto, debe ser aquella que te manda cuando te has relajado tanto que nada consigue emocionarte.
Adiós Londres es mi último articulo para El ibérico. Una puerta se cierra, pero una ventana se abre…
Imagen tomada por mi flatmate Helena Sikk
Estoy cagada, pero feliz, pero triste, pero rara, pero entusiasmada… Digamos que estoy, que no es poco.
Y siempre gracias, gracias por acompañarme en todas mis «cagadas» 😉