“Carolina” es el sonido que me ha sido asignado en esta vida. Dependiendo del idioma en el que se pronuncie puede ser suave y sutil o sonar como un insulto.
No hay sonido más dulce para mis oídos cuando sale de los labios de una persona que me ama y a la vez sonido que más aborrezca cuando viene de alguien que casi te lo escupe.
Nunca me había parado a pensar en el valor de las palabras, en los sonidos que las conforman, en la vibración que producen en el interior de nuestro cuerpo.
Del mismo modo que nunca me paré a pensar que los pensamientos van dejando un surco en el disco que es nuestra mente, cuanto más repites un pensamiento -o patrón- más profundo es el surco y más tiende tu tren del pensamiento a descarrilar por él, al igual creo que los sonidos que más repetimos son los que conforman nuestro estado de animo.
Por lo tanto hay que cuidarse de los sonidos que nos impactan cada día. Al igual que el agua tiene una memoria y puede notar las distintas vibraciones que emiten las personas, a nosotros – y nuestro 60% de agua que nos conforma- nos afectan las personas tóxicas que solo se quejan. Sus vibraciones me dejan exhausta ¿no te ha pasado nunca? de nada sirve comerte un plato de verduras frescas y ecológicas si lo compartes con alguien que te va a bajar el nivel vibratorio.
Así que me he quitado del gluten, la lactosa y mil cosas más, en definitiva todas las cosas tóxicas de mi vida.
Más vale solo, mi niño, más vale solo.
Cigi dice
Pues enhorabuena Caro, que cuesta mucho dejar las «drogas».
Un beso
Caro Chan dice
No teeee mettassss drroooggaiiinaaaa, noooo te la metttassss!! jajajaja
Andres dice
Holas!
Cada sonido tiene asignada una frecuencia (en Hz) y si, influye en nuestro organismo, los ruidos de la ciudad causan stress, sin ebargo también estan los buenos, como la música y el de cubiertos y vasos cuando ingresas a un restaurante. =D
Acerca del surco y el tren, es un pensamiento típico de cultura occidental, en oriente sería algo positivo, que halles una senda y te mantengas en equilibrio dentro de ella.
Y eso de almorzar sano con gente tóxica, bueh… por eso en lo posible almuerzo solo, te desenchufas, respiras pausado y concentras en los sabores. Y si en una de esas aparece un perrito, gatito o ave que te piden compartir con la mirada… te has ganado un amigo 100% buena onda ^___^u
C-Ya!
Caro Chan dice
Complicado concentrarse en lo tuyo sin que se note que estás pasando de la otra persona, y no hay nada peor que una persona tóxica que una persona tóxica contrariada!! jajajaja
Koi dice
Caro genia no dejes de escribir nunca! 😀
Un beso
Caro Chan dice
*.^ Gracias mil Koi, necesitaba escuchar esto…