Dale al play, maestro…
I’ve flown too high on borrowed wings
Beyond the clouds and where the angels sings
In a sky containing no one but me
Up there’s all empty and down there’s the sea
No one here but me
There’s nothing but light
That comes into sight
There’s something up here that makes me wince
And I still got the feelings that I’ve felt ever since
I got to this place arrived at last
In front there’s the future right back there’s the past
Everything’s moving so fast
There’s nothing but light that comes into sight
The present like I’ve never seen it before
Is this the right place to stay
Please my wings fly me away.
Hacia mucho que no hablaba de música, y es que toda mi vida esta llena de ella, si no la llevo en los cascos la llevo en mi cabeza, canto (para desgracia de mis compañeros de piso), tarareo, la toco con mis dedos sin tener ni idea -de hecho acabo de averiguar al subir una foto al FB que no tengo ni idea de como coger una guitarra flamenca¬.¬UU- Incluso la paladeo cuando cierro los ojos; Si mientras hablo con alguien una de sus palabras me recuerda a alguna canción tengo que cantarla (si, soy un puto coñazo y lo sé… >.< ).
Por favor alas sacadme de aquí.
La cuestión es que tengo varias canciones fetiches en mi vida, y hasta hoy no sabia porque en mis mp3 suenan más canciones antiguas que nuevas -con la de buenas canciones que salen cada día- así que mi curiosidad innata hizo el resto.
Para hacerle hueco en nuestra cabeza a una nueva canción debemos hacerle una concesión emocional, esto es algo que nos cuesta hacer ya que inconscientemente, somos muy de unir emociones a las canciones (vamos si no tienes el lóbulo temporal derecho dañado) y dejar espacio para una nueva canción es complicado a veces.
Siempre que escuchaba esa canción sentía que entendía perfectamente la sensación de querer salir volando, de querer tener alas y huir de la situación en que me hallara, siempre en mis 33 años al escucharla me sentía muy identidficada.
- Cuando estaba en mi cuarto de adolescente.
- Cuando empecé ciencias ambientales.
- Cuando estaba de erasmus.
- Tumbada en la cama del piso de mi ex en Madrid.
- Mientras saltaba en la cama elástica ^.^
Ajá, siempre…hasta el otro día. Caminaba por Londres mientras iba a mis lecciones de inglés, temprano, la gente iba con prisas y mala caras, yo avanzaba con mi té verde, mi sonrisa y saltó la pista, la iba tarareando en mi cabeza y me di cuenta de que no, que por primera vez en mi vida vivida no quería estar en otro sitio que no fuera ese, no necesitaba alas para salir de alli, OMG!, la sensación me golpeó tan fuerte que tuve que parar en seco y hacer esfuerzo para no llorar. Estoy donde quiero, por primera vez en mi vida. Anita, Ruty ¡¡Estoy donde quiero estar en mi vida!!! Os eché tanto de menos en ese momento <3
En el peor momento y con la mejor sensación.
Y bueno, no es el mejor momento de mi vida ni por asomo, incertidumbre laboral, pensando en mudarme de casa y con el tema sentimental un tanto revuelto…y no, físicamente tampoco estoy en mi mejor momento, ¿para que engañarnos? (ayy, que me acabo de dar cuenta que soy carne de cañon para los anxioliticos…jajaja) pero por un misterioso motivo estoy muy, muy feliz.
- Cagada pero feliz.
- Estresada pero feliz.
- Muñeca rotita pero feliz.
- Gordita pero feliz.
Nosotros pensando que todos esos adjetivos eran antagónicos y ahora resulta que son compatibles, ¡olé mi chocho moreno! jajajaja
Abriendo la mente y cerrando los ojos.
Y me he dado cuenta de que es así al llegar a Granada de vacaciones una semana, me flipa esta ciudad, me tiene robado el corazón, sus cielos y atardeceres son impresionantes, se respira tranquilidad, buenrollo y se puede llegar a todos lados andando (sobre todo después del desaguisado que han montado con los buses…) pero estoy convencida de que por ahora mi sitio no está aquí, está allí.
Pistas para saber si estás en tu sitio:
- No piensas en huir a la primera de cambio.
- Eres capaz de ver todas las posibilidades.
- Tienes ganas de más.
- Te sorprendes llamándolo “casa”.
- Cuando estás lejos piensas en lo que te estás perdiendo.
- Añoras a los cuatro gatos que tienes por amigos allí.
- Te entran ganas de correr desnuda por sus calles. (Bien, ese levantamiento de cejas es que estás atento).
Y esto es todo lo que ha dado mi cerebro esta semana, estoy agotada de Granada, necesito volver a casa y descansar <3
Highway to heeeelllll…
Y en cuanto a ti ¿alguna vez has sentido algo parecido?¿Tienes una canción fetiche? ¿Cuál es tu sitio en el mundo? ¿Aun no lo encontraste? Pues no desesperes que todo llega (si me ha llegado a mi con lo culo inquieto que soy…). Para tu dura travesía te propongo esto, te resultará más sencillo ir decidiendo.