Hace un par de años era la persona más activa del planeta, bueno a lo mejor no la más pero la segunda, en las redes sociales. No había blog que no leyera y comentara. El trabajo que tenía por aquel entonces me dejaba mucho tiempo libre y acceso ilimitado a internet. No me llenaba nada pero me permitió aprender muchas cosas que de otro modo no hubiera sido posible. Siempre defenderé que…
Desde que fui a vivir a Londres mi tiempo comenzó a ser mucho más limitado, teniendo que prescindir de entre otras cosas el tiempo que dedicaba a leer y comentar en blogs. A decir verdad no lo echaba tanto de menos como imaginé en primera instancia, pero no ha sido hasta hoy que me han sucedido un par de cosas referentes a comentarios en otros blogs -y además antiguos- que he recordado el porqué era tan importante para mi comentar.
Me ha escrito una chica majísima cuyo mail me ha hecho reír a carcajadas y me ha tocado una taza del blog de mi amigo Victor, no he tenido el placer de conocerlo aun en persona –Acho, huevo a ver cuando tiro para Murcia– pero nunca olvidaré cuando dedicó un par de horas de un sábado por la mañana para ayudarme a configurar Mailchimp (¡¡puto mono!!) y encima ahora me premia por comentar. Si es que hay mucha gente por el mundo que son amores con patas y nosotros nos empeñamos en fijarnos en los amargados de la vida.
Anda ya…
Yo creo que todo el mundo se pensaba que mis comentarios eran una estrategia de marketing para promocionar mi blog, pero nada más lejos de la realidad: Si ves mis estadísticas solo una docena de visitas al día provienen de blogs, la mayoría me vienen por búsquedas en Google y redes sociales donde se comparten.
Lo que me impulsaba a comentar en los blogs que me gustaban era la alta probabilidad de que te encuentren, y encuentres, personas que te resuenen. De este modo he encontrado a los que hoy puedo considerar muy grandes amigos, que aunque se hallen a miles de kms de distancia puedo pasarme las horas muertas hablando sin aburrirme y sin parar de reir. Para esto sirve, esta es la razón por la cual deberías dejar comentarios siempre. Déjate de SEO, estrategias y hostias y conecta, conecta con personas que te hagan crecer, reir, que te enriquezcan – las personas avecrem son mis favoritas- No tengas miedo de escribir a alguien que no conoces, nunca sabes las sorpresas que te puede deparar la vida.
Y ahora agradecerte que me comentes y de este modo permitas que otras personas afines a ti conecten contigo. Ya se está convirtiendo en una costumbre pero…