• Saltar a la navegación principal
  • Saltar al contenido principal
Caro chan

Caro chan

Viviendo en beta

  • Sobre mí
  • Servicios
  • Blog
  • Portfolio
  • Contacto
  • Show Search
Hide Search

Blog

Fofisana tu madre

Hasta los 24 años yo había pesado un máximo de 45 kilos. Pecho casi inexistente y algo de culo. Mi reprima Almudena y yo compartíamos tipo y ropa.

Digo mi reprima porque lo es por partida doble, su padre es hermano de mi madre y su madre es hermana de mi padre.

Loca te dejo, lo sé

Hoy ella, incluso después de ser madre, pesa 50 kilos y yo he llegado en algunos momentos a los 70.

Mismos genes, estilos de vida muy parecidos y resultados tan dispares. Llevo ya más de un cuarto de siglo sintiéndome culpable, pensando que algo tuve que hacer muy mal para coger tanto peso y terminar pareciendo que alguien se ha “comido” a Carolina.

He hecho mil dietas, me he reventado en el gimnasio para conseguir cómo muchísimo perder 10 kilos que vuelven conmigo a la primera de cambio.

Desde los 25 años me he sentido gorda.

Y no lo estoy, a día de hoy midiendo 164 cms peso 65 kilos, no tengo sobrepeso y mis analíticas están de libro de medicina. Fofisana qué dirán algunos.

“Fofisana tu madre”, les contestaría yo.

Lo que más me jode es que, en realidad, soy una de las personas más sanas que conozco. Hábitos saludables, comida ecológica, sin “vicios”, etc… Coño Vamos, que lo hago todo bien.

Digamos que época de Tiziano yo habría sido la Kate Moss del momento.

Carochan desnuda
Aquí en verano comiendo uvas y tocándome el…

La cuestión es que la semana pasada haciendo scroll en Facebook me encontré con una noticia que hablaba del tema de las “mid size”. Ni idea de qué existía eso. Y fue todo un descubrimiento porque me vi reflejada 100% en el post.

En la moda hoy en día hay dos vertientes, la ropa que hacen diseñadores para gente de la 38 para abajo y las curvy de la 46 para arriba.

¿Pero qué carajo pasa con las que tenemos una 40-42? Yo no me puedo aventurar a comprar nada online porque lo mismo me calzo una S que una XXL dependiendo de la marca, e incluso dentro de la misma marca si el patronaje es distinto también puede pasar.

Y que, a veces, los pantalones de la talla mas grande de una tienda no me cierren pero que en las de tallas grandes no haya tan pequeñas como para mí.

Sé que pensarás “problemas del primer mundo”.

El trasfondo de todo esto es que nos han hecho creer que estamos “gordas” cuando la talla media en Europa es la 44.

Esta maravilla es la media europea <3

Estoy segura de que hay muchas más mujeres como yo, que el mundo de la moda les ha hecho creer que están “mal hechas” porque al final nada de lo que nos probamos encaja con nuestro tipo de cuerpo.  

Y por supuesto si nos entra no nos queda, ni por asomo, como la foto del catalogo.

¡Qué chorprecha!

Eso por no hablar de las poses…

Me encantaría poder ver cómo queda el vestido solo en la 36, o la 46, sino en una 40 o 42. No creo que sea pedir tanto, la verdad.

Y si empezamos a apoyar a las marcas que empiecen a usar modelos “reales” en sus catálogos, más marcas harán lo mismo porque como bien dice el artículo “se trata de vender”.

Seguramente habrás leído el texto con un tonillo de cabreo, es correcto, lo has hecho bien ¡Aprobada!Jajaja

Y bueno, después del desahogo, solo comentarte que mañana 11 de junio es mi cumpleaños y por fin estreno la cuarentena (no la del covid XD).

Haría un mega fiestón pero no está el horno para bollos, quizás en un par de años vuelva a cumplir 40 para poder celebrarlo en condiciones. ;p

Mientras tanto me alegra saber que sigues ahí y que aunque sea en la distancia me desearás un “cumpleaños feliz”.

carochan feliz cumple
jajajaja ¡me encanta ser tan cutre!

Descuida me comeré yo la tarta por ti, que ya que me he quitado la etiqueta de «gorda» como que me noto más ligera.

A la mierda el postureo

postureo

El postureo en la redes sociales es, para mí, la nueva enfermedad mental del siglo XXI. Pretender que todo es maravilloso en tu vida y que vives en una portada de revista 24 x 7.

En el post de la semana pasada una lectora comentó que mi blog era “sinceridad en tiempos de postureo”. Y me hizo pensar en la poca gente cuenta sus mierdas y que si las cuenta es por alguna oscura razón marketiniana detrás.

Pero yo no estoy exenta de haberme metido en esa rueda de hámster. De hecho cuando tenía la empresa de Geisha del maquillaje me pasaba el día fingiendo algo que no era en las redes.

Me teñí el pelo de negro, y siempre lo llevaba planchado. Me puse una montura de gafas negra muy sería y vestía con ropa que me disfrazaba de “empresaria de éxito”.

¿Hola? ¿Tú quién eres? Las pestañas puestas con photoshop XD

Tenía que dar esa imagen seria y profesional. No me permitía ser yo misma por miedo a dar la impresión de ser demasiado “rara” o “loca” para que confiaran en mí.

Dejé de ponerme flores en el pelo, mis gafas cantosas y la ropa que me hacía feliz.

Planificaba hasta las stories y estaba siempre haciendo fotos a todo para tener publicaciones que subir todos los días.

No me permitía salir sin estar perfectamente peinada y maquillada.

En cada sitio chulo que visitaba me pasaba el rato haciéndome un book de fotos en vez de disfrutando y si pedía algo rico y se me olvidaba hacerle una foto me sabía hasta mal.

postureo maximo
Postureo de manual pero nivel pro.

Lógicamente es esa época estuve desaparecida del blog, con la excusa de que no tenia tiempo. Tiempo tenia, lo que no quería era mostrar mis miserias e inseguridades diarias. 

Vaya que alguien descubriera que eso que veían en redes no era real.

Y aún si hechas un vistazo a mi instagram, en el cual hace un año que no publico, solo verás fotos bonitas y frases preciosas ¿por qué en mi blog si me permito ser vulnerable y en Instagram no?

No he mostrado mi cara sin maquillar, mi pelo rizado sin peinar (soy un minión morado), la hinchazón de mi barriga después de comer, ni las estrías de mis muslos. 

Ni he puesto la frase inspiradora “Hoy me tenéis todos hasta el coño” aunque la pienso casi todos los días.

¿Cómo serían nuestra redes sociales si pusiéramos lo que realmente pensamos? ¿Si mostraremos nuestros “defectos” tanto como nuestras fortalezas? 

No voy a ser la jueza que desde mi púlpito critica todo lo demás, sabiendo que soy parte del problema, también puedo ser parte de la solución.

Desde hoy voy a tener las “anti redes”, donde enseñaré mis mierdas y pondré las frases que realmente me apetecen poner. Aunque sean políticamente incorrectas.

Porque una revolución comienza por uno mismo.

¿Te apetece unirte a #aLaMierdaElPostureo?

PD: Todo son risas hasta que te toca subir a internet tus mayores inseguridades.

Dos y dos son cuatro neuras

4 neuras carochan

Estar con otra persona es difícil. Ya estar contigo mismo lo es, pues imagina si ya sois multitud.

Yo tengo que lidiar con la voz en mi cabeza, que casualmente se parece mucho por el tono a la de mi padre, y sentirme como una niña pequeña que no sabe lo que está haciendo.

Porque no sé como será la voz en tu cabeza pero la mía, la mayoría del tiempo, me hace sentir que o no soy lo suficientemente buena o que debo de ser la persona más torpe del planeta.

Y sí, la teoría me la sé.

Es mi ego, el programa que funciona en automático y al que cómo no le des algo en lo que centrarse se dedica a susurrarte lindezas al oído. El mío como no me dedique a una actividad de vida o muerte es capaz de seguir con lo suyo por mucho que intente concentrarme.

El muy cabrón jodío.

La meditación, sí, también la practico y aunque en esos momentos consiga algo de silencio el resto de las 23:40 horas del día es otro cantar.

Por eso digo que estar en pareja es difícil, se suma lo tuyo con lo suyo y esto se convierte en un “más difícil todavía” con un redoble de tambores.

Tus neuras, sus neuras y el ritmo de la sociedad. Cóctel molotov para terapia de pareja.

Pero de poco sirve esa terapia si los que se sientan en ella son dos niños asustados cuyas voces en su cabeza no les dejan ver ni sentir empatía por el otro.

carochan gemelos

Romper es lo más fácil, lo jodido es quedarse.

Sí, sé que estás pensando que romper es peor y lo que la gente hace es quedarse en la comodidad de lo “malo conocido”. 

Reparte bienes, amigos y niños en caso de haberlos. Pero a la larga esa ruptura te deja con tus neuras, a las que ya les has cogido cariño y no te crean desasosiego.

No hay con quién ponerse de acuerdo, se acabaron las negociaciones, las explicaciones, los malos ratos y el pelearse por la serie que ver en Netflix.

Adiós a gestionar la proyección en la otra persona.

Te quedas en la gloria, te abres un Tinder para cuando te pique y tú en tu casa y Dios en la de todos. 

Easy peasy

Pero no, lo jodido es quedarse sin conformarse. Trabajando en tus mierdas, las suyas y las de todos tus compañeros para llegar a tener una relación de la que sentirse orgulloso. Y en esas ando… queriendo la vía rápida y a la vez entendiendo que las cosas buenas en las vida son una carrera de fondo.

¿Soy la única que lo quiere mandar todo al carajo semana sí y semana no? 

La quinta ola que será un Tsunami

Hace unos meses leí una noticia de que se esperaba que la siguiente pandemia después del covid fuera del tipo psicológico. Recuerdo haber pensado “Pobres, lo que les espera”.

Yo no me incluía en el saco, total mi vida antes y después de esto no había cambiado tanto:

  • Ya trabajaba desde casa 
  • Mis relaciones, aparte de mi familia y unos pocos amigos en Grana, eran vía internet
  • No salía por la noche 
  • Huía de cualquier tipo de aglomeración.

Creo que me equivoqué de cabo a rabo.

Tal que así es mi vida

Llevo meses sin escribir en el blog, no por falta de ganas, si no por no sentirme juzgada. Ya me ha pasado, poner que estoy mal y al siguiente post contar que estoy en la cresta de la ola y que me hayan llamado “bipolar”.

Ese término me toca algo muy profundo dentro de mí, mi mayor miedo. Sufrir en algún momento la dura y cruel enfermedad que tiene mi padre.

O en alguna otra ocasión expresar que no estoy conforme con la vida que llevo, como buena multipotencial de tomo y lomo, y que me hayan aconsejado que me ponga a parir hijos y ya veré cómo todo cobra sentido.

Y es lógico, al exponer mis pensamientos en este vasto mundo de internet me enfrento al despiadado juicio desde el más cobarde de los anonimatos.

De algún modo tiene que llegarte el karma si vives enclaustrada, digo yo. XD

Así que decidí que mis pensamientos estarían a mejor recaudo conmigo y así nadie me podría echar sal en las heridas.

Pero hoy me ha escrito una lectora y he recordado el propósito de mi blog (aparte de ahorrarme el psicólogo). Poner el el mundo mi granito de conocimiento, experiencia y cosas de la hostia que me encuentro en mi camino.

Y me he venido arriba. Post improvisado contando cosas guay que pululan por internet.

A ver es lo que hay, que tampoco te puedo contar experiencias vitales vividas al pie de un volcán. Los viajes tendrán que esperar una temporada más.

Otra cosa no, pero responsabilidad social tengo fijo. Eso y un novio que está acojonado con el bicho.

Sheldon alterado

He tirado de mis favoritos en Brave (por cierto si no conoces este navegador ya puedes instalarlo, te quita los anuncios, una gloria ver Youtube) y te vengo con un par de cositas, cuanto menos curiosas. Espero que las disfrutes.

1- He encontrado una app que te hace explorar coordenadas aleatorias en tu área. Si quieres darte un paseo y no sabes para dónde tirar te puede ayudar a ir con un rumbo y descubrí sitios nuevos. Se llama Randonautica.

2- También he vuelto a retomar la toma de decisiones con el dado, creo haberlo contado en el blog pero básicamente es elegir tres planes. Uno tuyo, otro de con quien estés y el tercero muy loco. Asignas un par de números a cada uno de ellos y lo tiras. 

De este modo vas a tener una tarde de lo más entretenida, te lo prometo. Si no tienes dado te recomiendo la app inspirada en “nuestras aventuras en Londres y el dado” que ha creado mi amigo Lucas. 

3- También si estás buscando plantillas para contratos a mí esta página me dió buenas ideas. Están en inglés pero para eso está el traductor de Google y tu arte tuneando para que suene humano. Puedes verla aquí.

4- Y por último recomendarte un libro de ficción ligerito y que seguro te va a enganchar cómo a mí. 

Los sietes maridos de evelyn hugo

Los sietes maridos de Evelyn Hugo. 

Lo descubrí en el canal de Youtube Raquel Bookish y para mí las mejores tardes en el sofá.

Nada como vencer la pereza inicial para que salga un post, ¿no?

Gracias de corazón a esa lectora que me ha mandado el abrazo bien fuerte que necesitaba y una pequeña patadita en el culo. No sé cual de los dos necesitaba más. 😉

Actualización en marcha

Hoy el día está nublado, supongo que como el año. Hacía mucho que no me paraba a escribir, ni a pensar para qué engañarnos, para mi blog personal. Y lo he hecho un poco obligada por las circunstancias.

Verás, viendo que los viajes quedan un poco pospuestos hasta nuevo aviso me estoy montando una oficina en casa perita en dulce y tenia que probar si me va guay el nuevo teclado con el soporte para el portátil y con la excusa pues he puesto melancólica y me apeteció hacer un update de mi momento presente.

Supongo que es muy parecido al tuyo: incertidumbre, allá donde mires incertidumbre. Yo por la parte que me toca he decidido ni mirar, la verdad. Cuan avestruz con la cabeza bajo tierra mientras pasa todo esto que está pasando que no sé si llamarlo realidad o ciencia ficción.

Pero no todo es un mojón de pato tan regular, he conseguido un trabajo muy interesante en remoto como UX/UI Designer (vamos la que diseña las pantallitas de una app para que el usuario no se pierda manejándola) y ando bastante entretenida con ello y mientras le doy a la cerámica en plan casero ya que el taller, obviamente, está cerrado al público.

Estoy creando un proyecto del que te hablaré cuando todo este follón cósmico deje de estar sobre mi ascendente, para rizar el rizo al año. Y la verdad que es lo primero que emprendo por pura ilusión y sin presiones marketinianas detrás así que mola.

Toma, toma, toma…

Si algo bueno me está trayendo esta situación es aprender a centrarme, a elegir mi bienestar por encima de todo, observar desde la distancia qué me trae paz y amor a mi vida y qué no… y ahora, es el mejor momento para hacer limpieza de todo eso. Hábitos, personas y situaciones.

Espero que estés llevando esto con mucha responsabilidad social, ánimo y sobre todo salud. Mucha salud, que por primera vez la valoramos cómo se debe.

Y si sabes de sillas, mesas, monitores y teclados para una oficina chachi piruli en casa, estaré encantada de leerte en comentarios ¡Esto es un mundo completamente nuevo para mí!

  • « Ir a la página anterior
  • Ir a la página 1
  • Ir a la página 2
  • Ir a la página 3
  • Ir a la página 4
  • Páginas intermedias omitidas …
  • Ir a la página 36
  • Ir a la página siguiente »

Caro chan

© 2023 Caro Chan. Hecho con amor y polvo de hada.

 

Cargando comentarios...